El pequeño pueblo de Colchani es un excelente punto de entrada al Salar d'Uyuni. Aquí, la gran mayoría de los habitantes viven de la granja de sal, y extraerla en bloques (para animales) o por grano (para consumo humano), con picos y púas. Una parte se vende, el otro se cambia por comida. Recientemente un museo cobró vida; Tiene explicaciones educativas sobre el comercio de la sal y las caravanas... de las llamas, esas prácticas comerciales son cosa del pasado. Un poco más adelante, en el Al suroeste de Colchani, el taller de la Cooperativa Rosario corta en enormes bloques de sal de muebles y obras de arte. Un hotel entero, hecho sal, incluso se construyó: el Palacio de Sal es todavía una muy importante lugar irreal de la región. Debido a su ubicación a orillas del Salar, la actividad turística se está desarrollando rápidamente.